Enfermedad Inflamatoria Pélvica (EIP): Una urgencia ginecológica que se puede prevenir
- delia duran
- hace 2 días
- 2 Min. de lectura

Enfermedad Inflamatoria Pélvica (EIP): Una urgencia ginecológica que se puede prevenir
El dolor pélvico no siempre es “normal”. Escucha tu cuerpo, atiéndelo a tiempo.
La Enfermedad Inflamatoria Pélvica (EIP) es una infección que afecta los órganos reproductores internos femeninos: útero, trompas de Falopio y ovarios. Se presenta cuando bacterias ascienden desde la vagina o el cuello uterino hacia la cavidad pélvica. Es una de las principales causas de infertilidad prevenible en mujeres jóvenes.
El diagnóstico temprano y el tratamiento oportuno son fundamentales para evitar secuelas permanentes.
¿Qué causa la EIP?
La mayoría de los casos de EIP se originan por una infección genital no tratada a tiempo, especialmente infecciones de transmisión sexual como:
Clamidia trachomatis
Neisseria gonorrhoeae
También puede relacionarse con otras bacterias vaginales (anaerobias), procedimientos ginecológicos (colocación de DIU, legrado, biopsias) o partos complicados.
¿Qué síntomas puede provocar?
Los síntomas pueden variar desde leves hasta severos, pero nunca deben ignorarse. Incluyen:
Dolor pélvico bajo persistente
Flujo vaginal anormal o con mal olor
Fiebre y escalofríos
Dolor al tener relaciones sexuales
Dolor al orinar
Sangrado entre periodos o después de las relaciones
Náuseas o malestar general
En algunos casos, la EIP puede ser asintomática y solo descubrirse al investigar causas de infertilidad.
¿Qué riesgos implica no tratarla?
La EIP no tratada puede generar daño irreversible en las trompas de Falopio, favoreciendo complicaciones como:
Infertilidad tubárica
Embarazo ectópico (fuera del útero, con riesgo vital)
Dolor pélvico crónico
Abscesos tuboováricos (que pueden requerir cirugía)
¿Cómo se diagnostica?
La Dra. Delia Durán realiza una valoración integral basada en:
Historia clínica y síntomas
Exploración física y ginecológica (dolor a la movilización cervical o anexial)
Pruebas de laboratorio: biometría hemática, PCR, cultivos o pruebas rápidas para clamidia/gonorrea
Ultrasonido pélvico o transvaginal
En casos complejos: tomografía o resonancia pélvica
¿Cuál es el tratamiento?
El tratamiento debe iniciarse de inmediato, aun sin confirmar todos los estudios, para evitar daño permanente.
Antibióticos combinados de amplio espectro, por vía oral o intravenosa, según la gravedad
Tratamiento simultáneo de la pareja sexual
Hospitalización si hay fiebre alta, absceso, embarazo o falta de respuesta
Drenaje quirúrgico en casos de absceso o falla terapéutica
¿Cómo prevenirla?
Uso correcto y constante del condón
Detección regular de ETS en mujeres sexualmente activas
Tratamiento inmediato de cualquier infección vaginal
Evitar duchas vaginales o automedicación
Consulta ginecológica ante cualquier molestia pélvica persistente
El dolor pélvico no debe ser ignorado ni normalizado. La EIP es una condición seria, pero prevenible y tratable.
La Dra. Delia Durán te ofrece atención médica inmediata, diagnóstico sensible y tratamiento eficaz, con enfoque en prevención de complicaciones.
Comments